Mecanica

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martes, 19 de marzo de 2019

Regreso a un lugar olvidado

 
Regreso... regreso a este mi lugar olvidado, donde mis palabras cubiertas por polvo vuelven a la vida. Donde mis piensos recobran su color y esencia.

Todos nos ausentamos, todos en algún momento de nuestra vida dejamos atrás momentos, lugares, sentimientos, personas... los olvidamos, los dejamos morir. Algunas veces decidimos regresar y recuperar esos momentos olvidados, revivir sentimientos muertos, afortunados aquellos que lo hacen a tiempo, desdichados los que lo hacen demasiado tarde.
¿Y tu, que haz olvidado? ¿Que haz dejado morir? El remordimiento es cruel, el arrepentimiento atroz. 

Yo no vivo en ningún sitio, mi dirección es lo inesperado. Navego como el pez salvaje por esta extensión, en mi sangre hay fuego y en mis ojos chispas; Voy en busca de la libertad del viento que dominan todos los gitanos.

Corro tras una nube de olvido, bebo con los ojos miles de imágenes, voy a los confines del viaje. Navego hacia otro espacio sacudiéndome el polvo, olvidando mi nombre, los nombres de las plantas y la historia de los árboles, huyendo de este sol que me azota con látigos de inquietud, huyendo de ciudades dormidas durante siglos bajo los pies de la luna, dejando tras de mí ojos de cristal, un cielo de piedra y albergues de recuerdos rotos. No digas: "vuelve hacia el sol", ahora pertenezco al partido de la lluvia.

miércoles, 14 de octubre de 2015

Poema para ti...


Hoy quería escribirte un poema, deseaba plasmar en papel el cariño que te tengo, pero no se me ocurre, he quedado paralizado; necesitaba decirte cuanto te quiero y lo que estaría dispuesto a hacer por ti, mas mi pluma no se mueve en el papel, algo me impide poder escribir... Quiero darte un beso con mis palabras, regalarte flores bellas en rima, sonreírte con mis estrofas, acariciarte con mis ideas. Mas tu no me dejas, mi pluma se congela en el papel, me impides hacerlo, no sale mi poema desde mi corazón y descubro que eres el culpable, pues tu eres mi poesía, tu eres mi poema y mi canción, no puedo describirte, pues las palabras no alcanzan para hacerlo, pero por eso... solo por eso, quiero leerte, y plasmar mi poesía en ti, mi vida...

miércoles, 10 de junio de 2015

Mascaras...


El velo de una noche fría aleja mas mi corazón de tu alma, lo envuelve en una dulce melodía que va envejeciendo mis latidos... al mirar atrás veo partes de mi, partes que he dejado caer a lo largo de todo mi camino, millones de mascaras que he tirado, mascaras que se han roto a lo largo del tiempo, mascaras de felicidad cuando por dentro me estoy destrozando, mascaras de indiferencia cuando me importa demasiado, mascaras de fuerza cuando con trabajos logro ponerme de pie; mascaras, tengo miles de ellas, mascaras que uso para ocultar mi verdadero sentimiento... tengo una mascara para cada ocasión, excepto una, una mascara que no he aprendido a fabricar, una mascara que oculte ese dolor...

viernes, 13 de marzo de 2015

Escritos de un sentimiento...

Es bien sabido que no soy bueno al expresar mis sentimientos en persona, pero a la hora de escribir, mis sentimientos toman el mando y plasman lo que siento en cada escrito, cada frase, cada palabra... cada letra. Realmente no hace mucho que te conozco, sin embargo no se que me hiciste para que en tan poco tiempo sintiera gran cariño, tal vez fue esa cara inocente que pones al reír, tu ceño fruncido cuando haces un berrinche, cuando te molestas... o tal vez tus abrazos y caricias, tus besos lentos y suaves... tu trato, tu protección... el simple hecho de que desde un inicio fuiste tu. Tal vez me conquisto ese niño grande que vive en ti, no lo se; el hecho es que estoy aquí, pensandote a diario, te convertiste en mi primer pensamiento al despertar, el del transcurso del día y el ultimo que viene al anochecer. Te convertiste en mis ansias de que llegue ese viernes, te convertiste en mi almohada, tus brazos en mi cobija, y tus  besos en mis sueños; te convertiste en una persona especial, en una persona que deseo cuidar y proteger... simplemente te convertiste en algo que anhelaba tener por mucho tiempo. Al igual que tu, prefiero vivir el momento, y es lo que hago, mis escritos también plasman el momento, y justo ahora esto es lo que siento. Quiero alegrar tus días, quiero ser la persona que despeje tu cielo cuando tu día sea nublado, y ayudar a conservarlo cuando tengas días soleados, quiero robarte sonrisas inesperadas y risas sinceras. 

Debo admitir que no soy la persona mas romántica del mundo y generalmente no intento serlo, pues tiendo a arruinar los detalles, por eso decido mejor dedicarte mis escritos de ahora en adelante. Recibirás letras de mi corazón, cartas escritas con mis sentimientos y versos que se hacen a pulsos de latidos y suspiros...

Me gusta mucho tu forma de ser, tu vives siempre tus actos, con la punta de tus dedos pulsas el mundo, le arrancas auroras, triunfos y colores. La alegría es tu música, vida... la vida es lo que tu tocas. Tus ojos, en ellos sale la luz que guía mis pasos. Puedo apostar que no soy la primer persona que dice que a pesar de toda la grandeza que portas, eres difícil, eres un reto que camina por las calles, eres complicado y en ratos difícil de contentar, pero por eso... solo por eso se que vales la pena, lo he visto y me los haz demostrado. Se que también yo soy difícil, tal vez mas difícil que tu, soy frustrarte, a veces inmaduro, se que en ocasiones desearías darme un golpe, o tal vez dos; se que tengo una cierta facilidad de enojar a la gente, pero a pesar de eso sigues aquí... TU sigues aquí...

Te escribo para que sepas lo que siento por ti y la importancia que tomaste en mi vida, para que sepas lo mucho que te quiero y que este cariño crece cada día mas, te escribo para que sientas las cálidas palabras que nacen por ti, para que sientas que estoy ahí contigo a cada momento, para que sepas que estaré ahí ayudándote a subir y también a bajar. Te escribo a ti, y solo a ti, porque este escrito nació de mi, en tu inspiración...









lunes, 16 de febrero de 2015

Un escrito mas...


Escribo bajo tu inspiración, bajo tu calidez y tu protección, tu bondad y sencillez. Un escrito mas dedicado a ti, a tu ser y tu existencia. Me gusta pensar me buscas en las miradas de las personas de las calles, en la estela de tu café tras un delicado sorbo, en las bancas del jardín en días grises y fríos. Te dedico esto a ti, porque lo mereces, porque deseo que así sea; te busco, te busco en las calles, en las sonrisas,  en los abrazos y las despedidas, regreso cada día a casa con mi búsqueda fallida, pero con la esperanza de que tal vez... solo tal vez el día de mañana te encuentre. Te dedico este escrito a ti, donde quiera que estés, y aunque se no leerás esto, la dedicatoria la tendrás mientras este escrito este presente. Te dedico mis abrazos, mis sonrisas, mis logros y victorias, mis risas y mis sueños, mi tiempo y mi vejez... te dedico todo porque lo mereces. A ti, que un día llegaras, te dedico todo mi ser, porque lo valdrás,  a ti, sombra bajo el atardecer cuya silueta solo veo a lo lejos y aunque no te conozca aun, se pronto llegaras... 

Días grises...


Los días nublados son inspiración para muchos, mensajeros de recuerdos creídos olvidados, tortura para aquellos parados junto a la ventana viendo la viada pasar, regalo para aquellos sentados con su amor abrazados.

Versos de días grises, desahogando el sentir escribiendo, reflejar en letras lo que llevas dentro y tanta alegría, tanto dolor de pronto son solo palabras; una lágrima se torna una letra, un suspiro un recuerdo hecho espacio, cuando menos te das cuenta,  un texto que refleja tu sentir esta escrito.

Escribir... escribo porque me nace, porque al hacerlo reflejo mi ser libre, tal vez por eso mis textos se tornan ilegibles. Si leyeras todo lo que escribo, sabrías todo lo que he vivido, mis miedos y temores, mis logros y alegrías, mis decepciones, mis heridas en el amar y mas de una cicatriz que aun no se logra borrar.

Escritos dedicados al amor no conocido, un rostro borroso que no percibo, escribo y me enamoro, me inspiro y a veces lloro, sentimientos a flor de piel, flor que es pisoteada una y otra vez, sin embargo  vuelve a crecer esperando siempre los rayos del sol de un nuevo amanecer. 




sábado, 15 de noviembre de 2014

Cita con Soledad...


Hoy, como de costumbre, decido sentarme con mi café y mi tabaco, las nueve con treinta y dos y mi cita con la soledad se hace presente, me suele contar recuerdos de todo tipo, en ocasiones una ligera sonrisa se logra escapar en mi sorbo de café, recordando esos momentos felices. Mi mirada se pierde en las luces de la ciudad mientras la soledad continua con los recuerdos, en ocasiones son buenos, otros dolorosos, melancólicos o simplemente recuerdos vagos que mi mente ha decido borrar con el paso del tiempo. Las diez menos veinte, y soledad decidió tocar el corazón, en ocasiones como esta no suele ser ella la mejor compañía, pero no es una visita que se pueda correr, incluso al estar acompañado. Grita verdades, pues ella no miente, decide sincerarse y comienza hablar, no se puede ignorar, habla en la mente, en tu cuerpo... en tu corazón, invade tu cuerpo, tu alma, recorre tu cuerpo y eriza la piel. Las diez menos diez, y mi cigarrillo se convierte en cenizas; el humo se disipa entre el viento frio que entra por mi ventana, soledad me sigue trayendo recuerdos olvidados, recuerdos que pensé yo había olvidado. Las diez en punto; mi café se ha terminado, pero soledad sigue hablando, me levanto y me sirvo mas café, saco otro cigarrillo y lo pongo en mis labios húmedos, inhalo profundamente con los ojos cerrados, como si el humo fueran recuerdos que no quiero que salgan de mi. Las diez con quince minutos, soledad decide guardar un poco de silencio, mi mente se apacigua, mi corazón deja de latir aceleradamente, mis músculos se relajan y doy un sorbo a mi café. Las diez con veinte y soledad decide irse, y me despide con un agradable recuerdo, de que a pesar de que ella nos visite de vez en cuanto... realmente nunca estamos del todo solos...

Tiempo...


Caminar por la calle y ver esa peculiar danza entre las hojas de los arboles caer y el viento, ese viento cortante y frio, esas hojas muertas que alguna vez fueron parte de la esencia del árbol. Ver a tu alrededor y escuchar solo ruido, el tic tac de los relojes de la gente caminando a toda prisa, los ceños fruncidos de la gente dentro del automóvil  que pitan sin parar, la gente que vive la vida a toda prisa, sin percatarse de las pequeñas cosas que pueden alegrar el día. El tiempo, enemigo de todos; de la gente, de la vida... del amor. Largas las horas se sienten cuando no estas con ese ser especial, pero corto se hace cuando estas con esa persona, ¿Por qué?, tal vez porque no sabemos disfrutar el tiempo, las horas, los minutos... los segundos, o simplemente, ignorar el tiempo y disfrutar de la compañía. El tiempo suele ser cruel, muy  cruel, no perdona ni espera a nadie, infinito y sin bondad; hay que saber cuando ignorar el tiempo, cuando no tenerlo de compañía, pues el tiempo nos consume, nos mata muy lentamente, nos abre grietas en el rostro, nos pinta el pelo de un gris deprimente, nos consume la felicidad, nos trae recuerdos de arrepentimiento... nos trae la muerte.

Cuando mis años nuevos me hayan hecho viejo, seré un sabio consejo y tú reemplazaras el vuelo. Recorrerás las dunas del desierto pensando que ahí hubo agua y el sol te abrazará cada mañana para continuar el tortuoso tiempo. En cada palmera que encuentres veras el refugio del viento y acariciaras la sombra para un breve descanso en tu alma, se arrugará como yo, tu piel y tus pasos se verán cansados pero aun no sera el día de alejarte hacia la noche oscura.

Recordaras el rostro del ayer que llenas de luz, fueron para ti, las sublimes miradas y jóvenes sonrisas. Hoy esas mirada también las arrugará el tiempo. Y sin poder dar un paso atrás fluirán los recuerdos en titilante luz que se apaga, al Reflejo en un espejo.

miércoles, 12 de febrero de 2014

Tus ojos, tus labios, tu aroma...


¿Quien diría que nos conocimos en la distancia?... Que la distancia termino uniéndonos, que la distancia poco a poco creo un lazo, un lazo que se reforzó la primera vez que nos vimos. Tus ojos, esos hermosos ojos que debo admitir, me cohibieron cuando los vi por primera vez, tu mirada profunda y penetrante, acompañada de ese peculiar perfume y tu suaves manos. Y que decir de esos labios, esos gruesos  y suaves labios, que se unieron con los míos por primera vez; en ese momento mi corazón salio disparado, pues no podía creer que, todo inicio en la distancia, y en ese momento, justo en ese momento nuestros labios se unieron hasta el amanecer. Tu aroma, ese aroma que duro por varios días entre mis sabanas, dormir y percibir tu olor todas las noches, me hacia imaginar que estabas aun aquí, a mi lado, durmiendo junto a mi.

Fue a partir de ese día cuando todos los días comenzaba a extrañarte, cuando quería verte, abrazarte, besarte y sentirte. Los días son largos cuando se que no te veré, y tan cortos cuando estas a mi lado, pero es ese aroma, ese aroma tuyo que se impregna en mi el que me hace sobrellevar los días, porque es tu aroma es que me acompaña día a día, hasta el día de volverte a ver y una vez mas, tu aroma se quede conmigo. 

martes, 11 de febrero de 2014

Ruidos en el silencio...



Entiendo que es difícil, nunca ha sido fácil, nunca ha sido tarea sencilla plasmar los sentimientos en un par de palabras, ¡rayos! a veces hasta es complicado decir que es lo que sientes, lo que callas, incluso, lo que lloras. Todos buscamos alguna forma de desahogo, de sacar el coraje, frustración, el llanto... las penas; pero ¿Que pasa cuando no encuentras la forma? cuando todo lo guardas, cuando lo callas. Nunca he sido bueno desahogarme, nunca he logrado tener un lazo especial con alguien y sacar todo lo que llevo dentro; ¿Mascaras?... si, eso ha de ser, tengo infinitas mascaras por mostrar, soy tan bueno en eso, que por mas carcomido que este por dentro, por mas destrozado que este mi corazón, nadie logra notarlo. Al paso del tiempo logro olvidarme de todas esas penas, pero hay días en los que regresan, días en lo que soy victima de una avalancha gigantesca, acosado por mis fantasmas, por penas que yo mismo he acumulado. Eh llegado a pensar que tal vez soy un tipo de coleccionista de malos momentos, generalmente no logro que esto me afecte cuando estoy acompañado, tal vez es eso, tal vez es por eso que no me gusta la soledad... la soledad es silenciosa, en medio del silencio me gritan, me aturden, me desespero y busco a alguien para hacerlas callar. La soledad, a veces es buena, o al menos eso dicen, tal vez es cierto, tal vez no he encontrado la forma de controlarla, ella me controla a mi.

Amo a las personas que están a mi lado, creo que es tanto el amor, que no permito contaminarlos con mis preocupaciones, con mis penas o fracasos, a pesar de decir "Para eso están los amigos"... es cierto, sin embargo, no me gusta verlos tristes o preocupados por mi, no me gusta  verlos así, me mata.

Se, que algún día tendré una forma de desahogo, una forma de canalizar todo aquello que me inquiete, algo mas que el simple hecho de encerrarme en la soledad y escuchar el ruido dentro de mi.

Abrir los ojos, descubrir y esperar...


¿Quien dice que la vida es justa?, ¿Quien dice que lo que tienes lo mereces?... La vida no siempre te da lo que quieres, si no, lo que necesitas... ¿Pero quien sabe lo que en verdad necesita?, ¿Como saber si las personas que están a tu alrededor son las que mereces tener?... Tal vez por eso no siempre puedes tener a esa persona que quieres, que amas o anhelas a tu lado, tal vez desde un inicio no fueron destinados a estar juntos, tal vez sus caminos no se cruzaran... tal vez... tal vez.

Creo todo mundo nos hemos preguntado, ¿Cuanto debe pasar, para encontrar a esa persona correcta?, a esa persona deseada... a esa persona ideal. Pero creo pocos se detienen a pensar, que tal vez esta frente a nosotros, que esta a plena vista y no logramos verlo; Nos aferramos tanto a encontrar a esa persona, que buscamos fuera de lo que tenemos dentro, y a veces, cuando nos damos cuenta de que esa persona siempre estuvo ahí, que siempre estuvo en nuestras narices, la mayoría del tiempo ya es demasiado tarde, en otras ocasiones, cuando la suerte nos sonríe, nos damos cuenta justo en el momento indicado.

No planeo buscar el amor, nunca lo he hecho, tengo la idea de que este llega solo, llega acompañado de la persona que menos imaginas, en el lugar y momento, que menos imaginas; sin embargo, en muchas ocasiones pensamos que ya llego, ¡que esa persona es la indicada!, y solo nos queda aferrarnos a la esperanza, y rogar que sea el indicado... que sea el correcto.